A la gubia del gran artista Pedro Roldán y su círculo de escultores debemos, probablemente, uno de los más imponentes misterios de cuantos procesionan en la Semana Santa sevillana.
La escena es de una enorme plasticidad y movimiento.
También llevaban a dos malhechores, para matarlos junto con Jesús. Cuando llegaron al sitio llamado de la Calavera,crucificaron a Jesús y a los dos malhechores.
Los imagineros recrean el momento en el que, tras ser clavado en la cruz, Jesús es alzado en ella para colocarlo de manera vertical. En la delantera del paso unos sayones tiran de unas cuerdas para alzarla, mientras otros sujetan la cruz en el suelo y la empujan desde la base.
Fíjate en el recurso habitual de hace unos siglos, las caras afeadas de los que castigan a Jesús.
Además de estos sayones, en el misterio están los dos ladrones y dos soldados romanos y sus caballos en la trasera. Estos voluminosos caballos proporcionan al misterio una mayor sensación de grandiosidad, siendo sin duda, uno de los más pesados de nuestra Semana Santa. Por su vistosidad, la hermandad de la Exaltación es conocida también como la de los caballos.
Antiguamente otros dos sayones iban en la parte delantera del paso. Uno con una trompeta y otro con la sentencia del Señor en la mano.
La Virgen de las Lágrimas es la bella dolorosa titular de la hermandad. Bella talla anónima del siglo XVII atribuida a la Roldana.
Su advocación, Lágrimas, proviene del texto del Stabat Mater: Stabat Mater Dolorosa Iusta CruCem Lacrimosa. Estaba la madre sufriendo y llorando al pie de la cruz.
La Virgen procesiona en un precioso palio cuyo conjunto es aun mejor con el maravilloso manto de los talleres de Olmo. Una pieza de más de un siglo que es referencia y joya única en el arte del bordado cofrade.
Desde sus orígenes la hermandad está íntimamente vinculada a la Parroquia de Santa Catalina.
La antigüedad, el legado y la vinculación a miembros de la nobleza de la ciudad subrayan la importancia de esta hermandad en nuestra Semana Santa.
Sus hermanos visten túnica blanca con cinturón de esparto y antifaces morados. Entre las ricas insignias de la hermandad destaca su reconocible cruz de guía, con los atributos pasionistas sobre ella.
Fíjate, si puedes, cuando pase a tu lado el paso de misterio, en sus cartelas y ángeles pasionistas, de la Roldana, y de una calidad artística incuestionable. Y en el paso de palio observa el detalle de sus ángeles pasionistas de plata, en sus esquinas, o los remates de sus varales. Son espadañas de iglesias con campanitas doradas.
Mucha historia y detalles valiosos en esta hermandad centenaria. ¿Conoces tú algunos más? Puedes contárnoslos en los comentarios a este vídeo. ¡Los esperamos!