La hermandad de Pino Montano tiene el privilegio de poner la primera cruz de guía en la calle de todas las hermandades de la nómina actual en Sevilla. Sus nazarenos de túnica y capa blanca con capirote morado, poblan las calles del populoso barrio al que miles de cofrades acuden de todas partes, deseosos de Semana Santa.
Esta hermandad, que nació en un colegio, ha crecido exponencialmente en los últimos años. Ambos pasos y titulares concitan la atención y devoción de muchos cofrades.
Tanto el Señor de Nazaret como la Virgen del Amor son obra de Fernando Castejón.
El Señor procesiona en la delantera de un misterio que recoge el momento de revuelo que se provocó entre captores y seguidores de Jesús justo después de ser apresado en el Monte de los Olivos.
Jesús, ya apresado, está siendo empujado por un sayón en su hombro derecho para que camine.
Así que Judas se presentó con una tropa de soldados y con algunos guardias del templo enviados por los jefes de los sacerdotes y por los fariseos. Iban armados y llevaban lámparas y antorchas.
Pero como Jesús ya sabía todo lo que había de pasarle, salió a su encuentro y les preguntó:
–¿A quién buscáis?
–A Jesús de Nazaret –le contestaron.
Dijo Jesús:
–Yo soy.
Entonces echaron mano a Jesús y lo apresaron.
Pero uno de los que estaban allí sacó su espada y cortó una oreja al criado del sumo sacerdote
Jesús dijo:
–Dejadlo. Ya basta.
Tras el Señor, cautivo y maniatado, un sayón sujeta la cuerda que lo apresa, y un romano, en actitud desafiante, echa mano a su espada.
Delante de un olivo un sanedrita contempla la escena de la captura. A un lado del olivo, judas, el traidor, ya huye escabulléndose del revuelo. Al otro lado, otro Romano observa como un joven huye de la escena.
El Evangelio de Marcos recoge este curioso detalle:
Todos los discípulos abandonaron a Jesús y huyeron. Pero un joven le seguía, cubierto solo con una sábana. A este lo atraparon, pero él, soltando la sábana, escapó desnudo.
La tradición ha querido ver en ese joven que aparece en la escritura al propio evangelista que narra la escena, San Marcos, que es también titular de la hermandad.
La Virgen del Amor tiene un rostro que aúna dolor y belleza. La hermandad va cuidando y enriqueciendo poco a poco su paso de palio, que luce ya elegante cada Viernes de Dolores.
Es especialmente emocionante el ambiente alegre, popular y festivo de la salida de la hermandad. También muy recomendables los momentos que se viven en la noche, a la vuelta de sus titulares hacia su parroquia.
El cambiar costalero de su paso de misterio y su acompañamiento musical por la agrupación musical de San Benito, atrae a multitud de cofrades.
Acompáñalo unos minutos y luego déjate atrapar por la doliente dulzura de la Virgen del Amor en su paso de palio.
¿Como disfrutas tú de las hermandades de vísperas, del Viernes de Dolores y Sábado de Pasión? Conoces más detalles de la hermandad de Pino Montano? Puedes compartirlo con nosotros y toda la comunidad en los comentarios a este vídeo.