¿Qué es para ti ser madre? Tras respuestas más o menos rápidas en inmediatas, el silencio y la mirada al interior se hace evidente. Bucea en recuerdos, unos mejores y otros peores, y, conectando con los sentimientos más profundos, busca palabras y metáforas para tratar de explicar lo que solo se siente, lo que va más allá de lo que pueda decirse de manera concreta o inmediata…
Ser madre te obliga a ser fuerte, esconder el miedo, sacar fuerzas de donde no las tienes…
Ser madre significa que tu corazón ya no es tuyo, sino que está donde tus hijos y nietos están…
Es dar sin fin… sin esperar nada a cambio…
Es aceptar que no son tuyos, que eligen su vida, que son y quieren ser libres…
Es aprender cada día…
Un viaje lleno de alegrías, pero también de incertidumbres… Es vivir la vida a través de sus ojos y corazones, que toman por completo el tuyo y para siempre…
Es saber que puedes fallar, encontrar tus límites y tratar de ir más allá de ellos…
Es sufrir y gozar a partes iguales…
Unos sentimientos encontrados que ya vivió María al presentar a su hijo en el templo y encontrarse con Simeón. El gozo en sus palabras iniciales: Ahora, Señor, según tu promesa, despides a tu siervo en paz, porque mis ojos han visto a tu Salvador: lo has colocado ante todos los pueblos como luz para alumbrar a las naciones.
Y también el anticipo del dolor… Mira, este niño está destinado a hacer que muchos caigan y muchos se levanten. Será un signo de contradicción que pondrá al descubierto las intenciones de muchos corazones. Pero todo esto va a ser para ti como una espada que te atraviese el alma.
El rostro compungido, la mano en el pecho o sosteniendo la corona de espinas… La Soledad es un gran signo de interrogación para todos los cofrades que la vemos sola, al pie de la desnuda cruz…. ¿Es posible tanto dolor? ¿No es la Madre de Dios? ¿Cómo es esto posible?
El misterio de la vida y del dolor se unen cada tarde de Viernes Santo, en la que toda la iglesia celebra y vive ese momento oscuro de la pérdida profunda y quizás, muchos, la de la ausencia de sentido…
Como Ella, muchos miramos al cielo. Buscarlo es ya anticipo de esperanza… saber que sigue ahí a pesar de la muerte, anticipo de vida y resurrección…