Conoce la Hermandad de La Esperanza de Triana
Triana desborda todo su arte e idiosincrasia en la Madrugá sevillana. Miles de cofrades acuden de todas partes del mundo a vivir la emoción de ver a esta cofradía a ambas orillas del río Guadalquivir.
La Esperanza de Triana es la mejor metáfora de la pasión vivida desde la alegría de sabernos anticipadamente resucitados. Es la alegría y la vivencia desbordante de la fe popular.
Aunque también sabe caminar elegante y cautivar con silencio a quienes la contemplan, la Esperanza es puro mensaje de sí misma, de esperanza y alegría.
Te ofrece su pañuelo para consolarte y te cautiva con su caminar trianero.
Nunca faltan sus tres pasitos en la explosión de las marchas que la acompañan, o algunos pasos atrás para decirte que no te deja, que quiere quedarse contigo, pero debe acudir a llevar su esperanza a otros.
Este caminar trianero toma su máxima expresión en el misterio del Señor de las Tres Caídas. Uno de los pasos más buscados por aquellos cofrades que especialmente disfrutan de la comunión entre banda, música y paso de Cristo. La banda de las Tres Caídas de Triana es una prolongación del misterio y sus pies, sus costaleros. No se entienden los unos sin los otros. Ambos consiguen acertar con el también mensaje que el Señor caído nos propone. Caído pero en posición de levantarse y seguir caminando. Ignorando al romano sobre el caballo que le indica que avance. Él lo sabe. Y sabe que todos le miramos y nos reflejamos en su rostro.
Las caídas de Jesús a lo largo del camino de la cruz no aparecen en el Evangelio; han sido trasmitidas por la piedad popular, especialmente por el rezo del viacrucis, en el que se ora en cada una de sus tres caídas.
El Santísimo Cristo de las Tres Caídas es obra anónima del siglo XVII. Esos siglos de devoción están depositados en su rostro sereno. Lo acompañan en el misterio una mujer con su hijo en brazos, una niña a su lado, el cirineo que le ayuda a cargar la cruz, y el romano a caballo. Calamar, como lo llaman en Triana, por los ríos de tinta que corrieron en la suscripción popular de cuantos aportaron económicamente para sufragar su encargo. Al romano se le conoce popularmente como Rafaé.
Todas las figuras secundarias son de Castillo Lastrucci.
Entre ellas falta el esclavo etíope negro que sostenía una soga que ataba al Señor. Esta figura formó parte también del misterio de Jesús Despojado durante más de 20 años, cedido por la Esperanza de Triana.
El misterio procesiona sobre el magnífico paso que tallara Guzmán Bejarano, en el que destaca también su magnífica iluminación por candelabros de guardabrisas.
Y si fabuloso es el misterio, qué decir del palio que cobija a la Esperanza. Sus caídas son quizás las más vistosas y anchas de las que podemos contemplar en Semana Santa. Le dan un movimiento único y sonido a la mecida del palio.
Todo el diseño de magníficos bordados recoge el estilo regionalista y tradición alfarera y ceramista en Triana. La identificación de la Virgen, su palio y el propio barrio es completa.
El paso es concebido como una barca de planta para la que popularmente llaman también Reina de los marineros.
Este gremio estaba muy vinculado a la Esperanza desde sus orígenes. El ancla es un símbolo muy presente en la hermandad, y símbolo especialmente de ella, la Esperanza de Triana. Puedes ver un ancla en sus manos, en su pecho, y en múltiples elementos de la hermandad. Es el ancla que fija la fe a la Esperanza.
Hay múltiples elementos que hacen referencia al mar y a sus seres en el paso. Fíjate por ejemplo en los basamentos de los varales o en las maniguetas.
La hermandad y sus bandas cuidan muchos elementos especiales cada año en la Madrugá, haciendo cada año que los cofrades estén atentos para vivirlos.
Puedes vivir alguna levantá “a la música”. Descubrir algún homenaje inesperado. O disfrutar del canto que acompaña y expresa oración.
Seguro que conoces más datos y curiosidades de la Hermandad de la Esperanza de Triana. Puedes compartirlos con nosotros y toda la comunidad en el área de comentarios a este vídeo. Estaremos encantados de leerlos y aprender contigo.